La pubalgia es una lesión frecuente en los deportistas, principalmente en los hombres, sin embargo, las personas que no practican deporte de alto rendimiento también pueden llegar a presentarla.
Antes de identificar las características de la pubalgia, es importante saber ¿qué es y porqué se presenta?
La pubalgia en el deportista es una serie de lesiones que afectan las estructuras locomotoras (músculos, tendones, articulaciones) de la parte anterior de la cintura pélvica o en la zona inguinal, generalmente se presenta de manera crónica, es decir que se mantiene por un tiempo prolongado.
Este conjunto de lesiones aparece a causa de movimientos repetitivos como carrera, cambios de dirección y ritmo o golpeo de balones, es muy frecuente en deportes como futbol, jockey, esquí, rugby, entre otras.
Entonces ¿Cómo puedo saber si tengo una pubalgia a causa del deporte?
De primera instancia se podrá identificar por medio de la sintomatología:
> Dolor en la línea inguinal
> Dolor en la parte baja del abdomen
> Dolor en el muslo, principalmente en la parte interna
> Limitación en el movimiento de las piernas
> Alteración en el movimiento lumbo-pélvico
Estos síntomas se presentan con mayor intensidad al momento de realizar la práctica deportiva, mejorando el dolor al momento del reposo y existe también rigidez en la musculatura abdominal y de miembros inferiores post entrenamiento.
La segunda forma de poder saber si padeces de esta lesión es por medio de la valoración clínica de un fisioterapeuta, la cual consiste en realizar pruebas funcionales, identificación de puntos dolorosos y en caso de ser necesario el análisis y observación de estudios de imagen como radiografías o resonancias magnéticas.
Una vez identificado y confirmado el diagnóstico de pubalgia es importante realizar un tratamiento para mejorar los síntomas y poder continuar de forma eficaz la práctica deportiva.
Dentro del tratamiento fisioterapéutico existen diversas técnicas que podrán ayudar a disminuir el dolor, dentro de ellas podemos encontrar: el uso de agentes físicos, terapia manual por medio de movilización de tejidos blandos, masajes descontracturantes, así como ejercicios terapéuticos enfocados en el deporte que se práctica, estiramientos y ejercicios que favorezcan la cinemática lumbo-pélvica.
Gracias al tratamiento establecido por el fisioterapeuta se podrá continuar con la práctica deportiva de una mejor manera, así que ya lo sabes si presentas alguna de esta sintomatología acude con un fisioterapeuta.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Bouvard, M.; Lippa, A.; & Reboul, G. (2012). PUBALGIA EN EL DEPORTISTA. ELSEVIER. Recuperado de: https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1286935X12608247